Ruinas de la Ermita de la Magdalena (Arroyo de la Luz)
28/06/2020 | Historia, Geografía y Patrimonio Histórico
por Arqueogestion
Cuando te dedicas a la arqueología, a la protección del patrimonio histórico y arqueológico en ocasiones te encuentras con lugares llenos de historia que por una razón u otra han sido olvidada de la memoria de los hombres y se hallan en medio de los campos arruinándose día a día, y en algunos casos, hasta el punto de desaparecer del todo. Este es el caso de la Ermita de la Magdalena, acerca de la cual, como descendiente de arroyanos me han hablando mis familiares alguna vez, y mi ansia de saber una vez más hizo que sobre mi bicicleta me volviera a hacer a los caminos para hallarla en el lugar donde me habían hablado de ellas, aunque también es cierto que he hallado ciertas referencias a la misma en otros blogs, pero he preferido acercarme a ella para descubrirla con mis propios ojos.
Bien es cierto, que estoy totalmente de acuerdo cuando en el blog de mi compañero bloguero, Rubén Núñez, de Cáceres al Detalle, leí que este “es uno de esos lugares que parecen avergonzarse del estado en el que se hallan en la actualidad”, del cual solo queda la portada y algunos sillares dispersos, y como es lógico no alcanzas a entender el porqué la ermita ha llegado a este lamentable estado de ruina, casi desaparecida del todo, ya que ni siquiera sabemos ni tenemos apenas datos acerca de ella.
No obstante, en mi espíritu erudito me ha permitido rescatar del olvido algunos datos sobre la Ermita de la Magdalena que gustosamente compartiré con todos vosotros siguiéndole el rastro como un detective a través de distintas fuentes: la primera de estas fuentes es el Interrogatorio de la Real Audiencia de Extremadura de 1791 en el cual se hace referencia que había ocho ermitas en la Villa de Arroyo, entonces llamado “del puerco”, siete situadas a las afueras y una dentro de la misma villa[1]; obviamente una de estas ermitas situada fuera del pueblo es la de la Magdalena, ya que en el mismo Interrogatorio dice que distaba del pueblo “mil doscientos pasos más o menos”, y en la cual también se celebraba misa todavía a finales del siglo XVIII. El Interrogatorio nos proporciona además la información de que en la citada centuria, la Ermita de la Magdalena tenía un párroco propio quien administraba sus cuentas junto a un notario. No obstante, la siguiente fuente que consultamos es el Diccionario Geográfico Estadístico de Pascual Madoz (Tomo III) de 1848 donde también hace referencia a la Ermita de la Magdalena pero no nos proporciona ningún dato concluyente, ni distinto al que ya teníamos de 1791; simplemente el Diccionario de Madoz enumera las ermitas que existían por aquel entonces en la villa.
No contento con las reducidas noticias que proporcionan las fuentes contacté con el Cronista Oficial de Arroyo de la Luz, D. Francisco Javier García Carrero que me proporcionó interesantes datos sobre esta la misma, la cual tenía el nombre de Santa María de la Magdalena y que era una pequeña ermita que estaba al servicio del pueblo, ya que otras estaban al servicio de algún gremio en particular en la población. Además nos confirma el dato que también habíamos observado en el interrogatorio de la Real Audiencia de Extremadura, de que sobre esta Ermita llevaban las cuentas el párroco de la única iglesia que tenía el pueblo entonces, La Asunción, y el notario de la villa.
Además, según D. Francisco Javier, la Ermita de Santa María de la Magdalena contaba con muchos devotos muy fieles ya que se celebraba misa diaria en la misma, poseía tierras que arrendaba por quinquenios para la producción de trigo que le reportaba 114 reales por año y que se utilizaban generalmente para la puesta al día de la ermita, reparación, etc.
Sin duda el dato más interesante que nos ha aportado es que esta ermita, al igual que otras en la población, incluyendo la propia Ermita de la Luz, sufre terribles destrozos durante la guerra de la independencia y muchas de ellas quedan en ruinas. Cuando la guerra acaba la prioridad de los arroyanos fue la reconstrucción de la ermita de la Virgen de la Luz así como el encargo de nuevas imágenes de Virgen y de Cristo que son los que actualmente se veneran y cuyos originales fueron quemamos por los franceses hacia 1809. Por lo tanto para la reconstrucción de la misma se utilizan materiales procedentes de la Ermita de la Magdalena ya que esta era la más próxima a aquella. Posteriormente vinieron los procesos de desamortización de Mendizábal, y como consecuencia las ermitas pierden en su mayoría todas sus funciones produciendo que muchas hayan desaparecido en la actualidad.
Hoy en día, lo único que queda de la Ermita de Santa María de la Magdalena es un inmenso pilar en medio del campo; de hecho popularmente a esta estructura los paisanos le llaman “la columna”, y para explicarlo aparte del proceso histórico que, justifica en gran parte el hecho de que haya llegado en ese estado a nuestros días, se añade la cuestión de que ya en sí nadie pensó en reconstruirla ni se planteó siquiera el recuperarla, y lo mismo ha pasado con las otras ermitas, las cuales hoy ya ni siquiera existen y si existen solo están en las fuentes bibliográficas antiguas que nos permiten a los historiadores rescatarlas en cierto modo.
Datos Adicionales|[1] Dato proporcionado por el Cronista oficial de Arroyo de la Luz, D. Francisco Javier García Carrero: Arroyo de la Luz llegó a tener hasta 8 ermitas, aunque de ellas únicamente siguen operativas tres. Dos de ellas, la de San Antón y la de San Sebastián (Santos Mártires), a mediados del siglo XX se convirtieron en parroquias y siguen prestando este servicio desde entonces. Y la otra, es la Ermita de la Virgen de la Luz. Las otras cinco perdieron su función después del proceso desamortizador incluyendo la Ermita de Santa María de la Magdalena.
Fuentes
Interrogatorio de la Real Audiencia de Extremadura de 1791
Diccionario Geográfico Estadístico de Pascual Madoz (Tomo III) de 1848
Datos aportados por el Cronista Oficial de Arroyo de la Luz, D. Francisco Javier García Carrero.
UTM: ETRS89 29N 707184/4374985